Actualmente, una de las mejores maneras de restituir las piezas dentales extraídas son los implantes. En el mercado hay decenas de marcas comerciales que ofrecen implantes. A la hora de colocar los implantes es esencial que el implante sea de calidad excelente, que el paciente sea un buen candidato para colocar implantes y que el especialista que realiza la cirugía esté altamente cualificado.
Con los implantes podemos restaurar bocas donde falta algún diente (implante unitario). En estos casos se suele colocar un implante como si fuera una raíz y luego se suele poner la corona. También podemos colocar implantes cuando faltan varias piezas. En este caso se suele poner tantos implantes como piezas que faltan, o bien poner implantes y luego hacer un puente.
En ambos casos, la restauración es fija y el paciente no se la puede quitar. De esta manera podemos poner desde un implante hasta toda la boca.
En caso de que no quede ningún diente en la boca, ponemos algunos implantes. Encima montamos unas bolas que hacen que la dentadura postiza se pueda enganchar y sacar como si fuera un botón. Con este procedimiento conseguimos que la dentadura no se mueva y no tenemos que poner tantos implantes como en la dentadura fija.
- Fase quirúrgica
En esta fase, la cirujana sólo coloca el implante, es decir, la raíz. Esto se hace en la clínica, bajo un ambiente de absoluta esterilidad, y dura poco tiempo. Es una intervención que es absolutamente indolora, porque se anestesia con la misma anestesia que se utiliza para hacer un empaste. De este modo no es necesario dormir al paciente. - Fase de osteointegración
Durante este tiempo, el implante queda totalmente enterrado bajo la encía, y el paciente hace vida normal sin notar nada. Esta fase dura algunos meses (en función de cada caso) y es el tiempo que debe transcurrir hasta que el hueso enganche el implante. En algunos casos podemos poner coronas provisionales al implante si lo necesitamos por razones estéticas. - Fase protésica
Pasado este tiempo, podemos destapar el implante (hacemos que se asome con una sencilla intervención) y colocamos los pilares de cicatrización, es decir, unos tapones que tapan el implante mientras realizamos la prótesis. Finalmente colocamos la prótesis encima del implante. Esta prótesis se pega a través de conexiones intermedias.
En principio, cualquier persona es candidata a llevar implantes, pero se debe hacer un estudio exhaustivo de cada caso. En casos de diabetes mal controladas, fumadores de más de un paquete al día o personas con problemas de salud graves, se podría ver contraindicado la utilización de implantes como manera de restaurar la boca.
En la implantología, la posibilidad de rechazo no existe, ya que no estamos hablando de órganos vivos. Lo que puede pasar de forma excepcional es la no integración del implante. En este caso, el implante no se pega al hueso y se debe quitar.
Se espera un tiempo prudencial para la correcta recuperación del hueso y se vuelve a colocar sin coste por parte del paciente. Es decir, la intervención sería totalmente gratuita.
De todos modos, esta es una complicación rara si todos los pasos se siguen correctamente. Podemos decir que es altamente improbable que esto suceda. Sobre todo si, como en el caso de Blanc Dental, el especialista que coloca los implantes es una implantóloga altamente cualificada con dedicación exclusiva a las cirugías dentales.